jueves, 30 de abril de 2009

Otro día con influenza...




Ya sabrán, mi "malacopez" mental... ayer (o mejor dicho, antier, porque ya son las dos de la mañana), mientras esperábamos a que terminara una cesárea de la que no nos dejaron ser espectadoras... estuve hablando con mi paño de lágrimas, desquites, confesiones, etc.... y llegamos a la conclusión de tantas, tantas, pero tantas cosas, y hasta me dijo con quien me iba a casar... (guácala casarse). También mencionamos algunas cosas más íntimas y un tanto graciosas... en fin... nos reímos, lloramos, le hablamos a gente (o mínimo hicimos el intento, porque yo soy marica y orgullosa y no quise hacerlo aunque moría de ganas). La verdad es que fue medio triste la conversación, odio que la influenza me deje tanto tiempo libre y me ponga a filosofar a tal grado de darme cuenta de aquellos sentimientos enterrados.
Hoy en la tarde vi una película bien bella, con bella compañía, y fui feliz, pero también me puse a reflexionar sobre eso a lo que no siempre se quiere llegar, aunque se sabe, muy en el fondo, que se llegará... esto pasó por ciertas frases que escuché y me fueron un poco familiares.
La película se llama "Mejor imposible", no sé cuánto tiempo tenga pero sé que la pasan seguido en la tele, y como no veo la tele, jamás la había visto. Hubo un momento, en que uno de los personajes en ella dijo algo bastante significativo para mí, no recuerdo las palabras exactas pero era algo así... "Debes de sentirte afortunado de saber a quién amas, cuánto me gustaría estar en tu lugar", luego mencionaba algo haciéndole entender que tenía que luchar por lo que quería... ya saben, lo de siempre. Lo que me pareció interesante sobre el pequeño diálogo fue que muchas veces nos preocupamos por hacer que cierta persona nos hable, salga con nosotros, etc... y nos deprimimos si se fue con alguien más, si nos decepciona, nos engaña, blah blah... cuando mucha gente, ni siquiera tiene ese sentimiento hacia alguien, y vive buscando algo que no se encuentra, sólo llega... mínimo, cuando sientes algo por una persona, tienes una razón para luchar y que no es algo más, algo que puedas dejar pasar sin alguna señal de que estuvo ahí... y que muchas veces es menos afortunado el que se confunde sobre sus sentimientos, no sabe lo que quiere en realidad y no toma decisiones precisas que se relacionen con sus emociones, que el que sabe que camino seguir, hacia donde llegar y qué es lo que en realidad desea. No sé sí han estado en esa situación, pero es horrible cuando tienes como dos, tres o más caminos posibles a seguir, y ninguno te convence del todo, te sientes frustrado, vacío y un poco perdido, mínimo ahorita se lo que en verdad quisiera, aunque ya me resigné.
Hoy, o más bien, ayer, odié mi día como no tienen una idea… me sentí en una montaña rusa, en la mañana estaba súper aburrida, luego fui a rentar la dicha película y la de “siete almas”, luego fui a casa de unos amigos a verla, me la pasé bien. Llegué a mi casa y mi mente empezó a volar… Luego, un suceso inesperado e indeseado… que me decepcionó un poco, bueno, al decir verdad… bastante, es uno de esos momentos en el que el mundo se me viene encima junto con todos los planetas y estrellas del universo… y es que odio que dejen que mi imaginación vuelve, me haga pensar cosas que no son, sufrir… y dejar que el tiempo acabe con mis ilusiones poco a poco… odio que pase eso cuando todo se puede evitar aclarando las cosas a tiempo... o tal vez ni siquiera hubo un "a tiempo" porque en el preciso momento en que empezaron las cosas... ya era demasiado tarde.
Y ahora estoy aquí, sacando todo esto porque de verdad me frustré cañón, espero poder salir hoy... que en verdad lo necesito, y esta maldita influenza ya me tiene harta...

miércoles, 29 de abril de 2009

Crónicas de la ciudad con Influenza




De verdad me siento como en una novela donde todo el mundo se contagiará finalmente, como en Ensayo sobre la Ceguera, ¿o qué tal si es una manera de distraernos de parte del gobierno y va a haber un ataque terrorista o de extraterrestres?.
El jueves pasado que me dijeron que no iba a haber clase al día siguiente, primero le dije a mis papás la dicha información que recibí de un amigo por mensaje, y no me creyeron, unos dos minutos después, cuando se les ocurrió prender la T.V., vinieron a avisarme que, efectivamente, no iba a ir a la escuela al día siguiente y creo que me asusté un poco porque no me podía dormir... en vez de emocionarme pensé, "¿Qué fregados está pasando?", ya cuando se me pasó el miedo me emocioné porque iba a poder dormir más, y de verdad me hacía falta (escuela, CET, exámenes, blah, blah, blah.... y bueno el tiempo que pierdo aquí jajaja, últimamente tengo insomnio).
Me la he pasado en casa de Dafne o en casa de Jordy y de Michel jugando pin pon, jugando Risk
(ese día tuve suerte y en los dados me salían puros doble seis o cinco y seis, y todo mundo me dijo Bruja). Ayer Daf y yo estuvimos viendo como los niños jugaban age of empires y también aproveché para estudiar lite un rato (pero yo quería jugar Turista)... y me la vivo en la compu, he tenido la tentación de leer un libro y aprender a hacer lo de mate pero me da flojera... bueno sólo lo de Mate, el libro sí lo leeré, ya hice mi guía de Lite, falta la de Biología, Etimologías, Salud, etc... y aún así sigo de ñoña jaja :D.
Pero muero por ir al cine, o mínimo ir por un café, a hacer ejercicio y no puedo y ya me harté un buen, hoy veré si sí me hacen caso y quieren ir a jugar Turista jaja.
Hace 15 minutos me enteré de que mi hermana se va a ir a Valle de Bravo con una amiga, lo que significa más aburrimiento... me gusta estar sola pero no es para tanto.
Veré si al menos estos días me sirven para reflexionar un poquito o algo así, espero que salga algo bueno, porque luego me pongo a filosofar y no llego a nada o me pierdo aún más de lo que ya estaba...
La verdad quiero salir, eso de la enfermedad ya no me tiene tan alarmada, ya pasó, y nadie que conozca se ha infectado.... pero el único lugar al que puedo ir es al súper... (y ya fui, hace dos días).
Me quiero ir a Cocoyoc otra vez... :(

lunes, 27 de abril de 2009

Oportunidades perdidas




Me persiguen los recuerdos de algo que nunca fue... como quisiera borrar todas esas memorias, buenas o malas pero que forman parte de mi y que no me dejan dar un paso más cerca de ti, no me dejan estar a tu lado... ni decirte todo lo que me gustaría... busco algo imposible, algo innecesario, algo que finalmente me va a terminar aburriendo y no me doy cuenta de lo valiosas que pueden llegar a ser las oportunidades que pasan y pasan así como pasan los segundos, las horas, los días, los años...

viernes, 24 de abril de 2009

Hoy te extraño...




Sí tan solo supieras que eras tú... por quien fuí capaz de dejar todo a un lado y seguir con los ojos viendo hacia algo extrañamente conocido... tal vez sentí que me encontraba en un lugar muy cercano a la felicidad... sólo que me faltaba mucho más por recorrer. Y a pesar de todo, a pesar de que no soy alguien que suela sentarse a ver al mundo pasar... sigo aquí, pensando en ti... y hoy te extraño.

miércoles, 22 de abril de 2009

Amor Material



En el libro El domador del viento se pueden analizar un poco situaciones que vivimos (o de las que mínimo estamos enterados), que se presentan frecuentemente cerca de nosotros como lo son la avaricia, egocentrismo, adicción a sustancias y/o actividades, etc.
Se puede hablar de un personaje en específico en el que estos tipos de comportamiento se observan cada vez con más claridad en el transcurso de la historia. Este personaje es el tío abuelo de Haoyou, Gou Bo, cuyo único interés real dentro de la historia es obtener bienes de todo tipo.
En un principio, Gou Bo es capaz de comprometer a su sobrina con alguien que no era de su agrado y que, más que eso, era el asesino de su difunto esposo. En esta situación el personaje sobrepasa dos puntos importantes en la vida de una persona. Primero, la falta de consideración sobre la vida de alguien o de tomar una decisión tan importante y tan influyente en una vida ajena, y segundo, la falta de respeto hacia un ser difunto y perteneciente a la familia a la que supuestamente se aprecia.
Otro aspecto a considerar es la facilidad que tiene el personaje para utilizar seres humanos muy cercanos a él (aunque no precisamente emocionalmente) para su beneficio económico. Para Gou Bo fue muy fácil aceptar el falso hecho de que su sobrina Mipeng era “médium” pues le convenía para ganar dinero fácil utilizando sus supuestas habilidades para hablar con los espíritus y adivinar sucesos futuros o deseos del más allá, tomando “muy en serio” las opiniones que “decían” sus antepasados viendo siempre de qué forma podrían beneficiarlo. También le resultó muy sencillo utilizar las habilidades de su sobrino y robarle su dinero por el supuesto poder que tenía sobre él y aunque la obediencia que este tenía hacia el por ser el “líder” de su familia y por las inventadas predicciones de Mipeng que decían cosas como “El espíritu de Gou Pei manda a su hijo que sea obediente con su madre y fiel a sus ancestros” (McCaughrean, 28) le benefició bastante. Haoyou nunca estuvo verdaderamente obligado a cumplir con sus exigencias por ser estos bienes de su propiedad y frutos de su esfuerzo aunque sintiera que estaba defraudando a sus antepasados con desobediencias hacia su tío abuelo y se viera amenazado mediante golpizas y abandono.
Otro tema importante de mencionar es el de las adicciones presentes en la obra. Esta vez, no se trata de sustancias químicas, sino de actividades que el personaje realiza con frecuencia, apuestas y juegos de azar. Estas actividades tienen una gran controversia dentro de la sociedad pues han sido comunes durante muchísimo tiempo y siempre han causado el mismo tipo de efectos que dañan al apostador y a la gente que lo rodea. Gou Bo se apropia de los bienes de su familia para poder participar en apuestas e incluso llega a apostar, no solo sus bienes, si no a los propios miembros de la misma como lo hace con Quing’an obligándola a ir a un lugar al que ni se debería pensar en entrar por ser de tan bajo nivel social y moral.
Algo curioso que pasa con este tipo de comportamientos es que aún cuando la sociedad en general lo ve como algo malo, sigue viéndose dominada por este tipo de personas a las que lo único que les interesa son los bienes materiales y el poder, la emoción de tener más de lo que ya se tiene. Son muchos los factores que ocasionan esto, como violencia, amenaza, miedo o chantaje basándose en ideas propias del afectado como lo hace Bo con la “obligada obediencia” que tenía que tener su sobrino con él.
Este tipo de comportamientos en alguien pueden ser causados por la falta de confianza en su gente o en la misma persona, falta de autoestima, falta de confianza en el futuro y esto los obliga a utilizar otros medios para obtener lo que se quiere como robo o juegos de azar.
En conclusión, a veces, la gente se pierde dentro de su propia identidad y las cosas que la mayoría de la gente cree que todo el mundo valora, no son tan valoradas como de costumbre. A veces, nos enamoramos de una situación en la vida que apreciamos más que cualquier otra cosa y que no tendría que tener un valor mucho más importante de algo de lo que somos parte como lo es la familia.

domingo, 19 de abril de 2009

Vacaciones

Vengo súper mega feliz de vacaciones, me la pasé súper bien, valoré a muchos amigos que tengo y me sirvió para lo que se supone que sirve ésto, para relajarse y pasarla bien.

Ahora me frustra tener que entrar a la escuela, se supone que teníamos que hacer tarea pero estuve fuera (no tan lejos, pero fuera finalmente) y no hice nada... ni siquiera me enteré de que teníamos que leer el dichoso libro (bueno sí, pero muy tarde) y hoy me vengo enterando de todas las tonterías que nos dejaron y guácala, ya ni me preocupo, me choca que los señores profesores en verdad piensen que vamos a hacer algo en vacaciones, pobrecitos... pero bueno.

Viene la época de exámenes finales y demás cosas... nada más esta semana tengo tres exámenes, libro, ensayo, tarea de etimologías, ensayos de teatro (de baile, ósea mi parte), tarea de mate y el trabajo de historia (lo único que hice fue el baile).

Pero a pesar de todo, me he propuesto dejar de quejarme y echarle ganas otra vez, aunque había que descansar... no me iban a quitar mis vacaciones, la verdad me enoja un poco eso.

Es impresionante como la vida en la escuela me estresa tanto, puros problemas interpersonales, escolares, familiares... hasta amorosos... de vacaciones por alguna razón todo eso está de maravilla todo el tiempo... y estando en la escuela hasta el cabello se me cae a montones y creo que para sexto ya estaré calva y probablemente tendré que usar peluca en mi graduación (eso sí estaría bien triste)

A veces amo a mi escuela y pienso "wow, saldré del CET y la universidad será más fácil" pero eso no está 100% comprobado y la verdad es que en este momento si pudiera regresar el tiempo hasta finales de tercero de secundaria y me preguntaran mis papás si me quisiera cambiar de escuela, no lo dudaría y diría que sí... se supone que la mejor época de la vida es la prepa y la neta no me la estoy pasando mal pero podría ser aún mejor. También siento que más que el nivel académico de la escuela, es la presión a la que nos someten y la cantidad de trabajo "extra" a comparación de otras escuelas porque finalmente siento que aprendemos lo mismo... sólo que está un poco más difícil, y no es en todas las materias porque incluso hay profesores bien barcos y bien injustos que no se que hacen ahí y que nos enseñan cosas inservibles y no hablan bien como... (ok, no diré nada, pero los del CET saben de que hablo). Por el contrario, podría decir que Tony es la maestra de literatura y etimologías con los exámenes más difíciles en todo la zona norte de la zona metropolitana (si no es que de toda la ciudad) y por más que me gusten sus clases, y me haga pensar un buen de cosas y me ponga de sentimental con sus historias y sus profundos pensamientos, odio sus exámenes a más no poder.

A lo mejor si me relajé un poco teniendo vacaciones de semana santa :] pero... aún así, no saben cuántas ganas tengo de terminar este año, la escuela ya me tiene harta, el nuevo director (del que no diré mi opinión) ya me tiene harta, las múltiples actividades religiosas de la escuela (misiones, brigadas, renueva, soñar depierto, la presencia de consagradas y padrecitos, misas, moral, servicio social, servicio social y los 50 puntos de servicio social), el no poder bailar, el no poder salir los viernes por el francés que tengo que tomar los sábados por la falta de tiempo entre semana, la obra, exámenes, ensayos, libros, etc, etc, etc.

Sólo tres semanas... :]

domingo, 5 de abril de 2009

Mi casita minimalista.


Probablemente después de un tiempo aprenda a callar y a actuar mejor de acuerdo a la situación, estoy cansada de vivir dentro de un este lugar lleno de cosas inservibles que sólo bloquean el camino de cada paso que doy, es mejor vivir en un espacio vacío que espere ser llenado con algo que valga la pena y pueda crear ese equilibrio que busco.
Siempre queremos lo que no podemos tener... porque no dejar de buscar o de ver imposibles y sólo quitarse esa idea y seguir y esperar lo que la vida nos quiera dar de acuerdo a lo que nosotros le hemos dado... finalmente un cuarto vacio puede ser un tanto agradable también...
Muy probablemente el problema está en mí... y en esa barrera que no se ha quitado aún y que a veces quiere parecer invisible.

jueves, 2 de abril de 2009

Complicaciones

Nunca sabemos lo que nos puede llegar a pasar, nunca estaremos concientes de la grandeza, importancia y dificultad de algunas situaciones si no se nos presentan en algún momento, jamás estaremos preparados para algo que según nosotros jamás nos pasaría, aún así pasa… y puede hundirnos y hacernos sufrir si no sabemos como llevar la situación.

En el libro El curioso incidente del perro a media noche Mark Haddon nos narra la historia de una familia cuya situación no es la mejor, la historia es narrada por un niño con “necesidades especiales”, pero también con una serie de características realmente extraordinarias.

Muchas veces, cuando estamos confundidos, hacemos cosas que en otra ocasión no haríamos y que nos sacan de nuestra propia naturaleza, podemos a llegar a ser extraordinariamente rudos o muy pasivos, jamás lograremos entender qué es lo que nos mueve al actuar ni tampoco que cada uno de nosotros lo haga de manera totalmente distinta, jamás comprenderemos cómo todos tenemos formas diferentes de llevar una misma situación.

Cuando estas situaciones se complican nos enfrentamos con problemas que involucran personas muy cercanas, problemas que en un principio no pensábamos que se pudieran presentar.

Un ejemplo de ésta situación sería tener un hijo autista como lo es Christopher, sus padres llegaron a perder su estabilidad emocional de forma considerable. Esto lo explica Madre en la carta que le escribe a Christopher donde le dice que ya no podía más, que sentía que era mejor apartarse porque veía a su esposo muy paciente a comparación de ella, tal vez era cierto, o tal vez fue un acto de desesperación, egoísmo o cobardía. A Christopher no le importó en absoluto la posible explicación de porqué su Madre se sentía así y había dicho aquello, lo único que le importó fue el que Padre le haya dicho que su mamá había muerto y que haya creado una mentira cuando él estaba acostumbrado a no mentir, y estaba acostumbrado a no mentir no por cuestiones de moral, ya que éstas son un poco más complejas y profundas al analizarse o probablemente inexplicables en algunas ocasiones, estaba acostumbrado a no mentir porque es mucho más fácil decir la verdad que crear algo a partir de una base inexistente de la cual podrían surgir mil formas más de ver una misma situación que por sí sola ya es difícil y que con la realidad distorsionada se vuelve aún más complicada.

También cabe decir que las mentiras que los papás dicen a sus hijos son en su mayoría una manera de protegerlos y ellos lo comprenden después de un tiempo o al darse cuenta que el resultado fue benéfico, pero no es el caso de un niño con éstas características ni es algo que se pueda entender siempre porque a veces ni el que creó la mentira entiende las razones exactas.
Otro ejemplo es el que Padre haya actuado de ésa manera al enfrentarse con una situación que implicaba la huída de su esposa. Ella se comparaba con él y se notaba más débil y menos paciente, pero aunque aquello fuera cierto, el sentirse abandonado y con algo tan grande en sus manos lo hizo perder el control de su vida, teniendo una relación enfermiza con alguien, la señora Shears, probablemente por venganza o soledad. También lo llevó a matar a Wellington, el perro, sólo un animal… pero matar a Wellington para Christopher significaba todo, la gente no puede matar perros de una manera tan cruel, no nada más porque sí, pero para él no hay un porqué sí o un porqué no, no hay razones ni hay sentimientos, ni tampoco hay puntos de vista, sólo hay una verdad, Padre mató a Wellington, y eso es lo único que realmente importa.

El panorama que tiene Christopher del mundo es un lugar desde el cual ninguno de nosotros se detiene a mirar lo que lo rodea, jamás estamos a gusto con lo que tenemos o con lo que podemos a llegar a conocer porque pensamos en otras veinte cosas al mismo tiempo.

Es interesante el intelecto que un ser humano es capaz de alcanzar y pareciera que la vida interpone bastantes obstáculos en nuestro camino hacia el éxito, pero si lo vemos con los ojos de Christopher nos daremos cuenta de que a veces somos nosotros mismos quienes complicamos nuestra propia existencia. En algunas ocasiones, su forma de actuar ante diversos estímulos y la reacción ante situaciones comunes de la vida podría tal vez ayudarnos a ver las cosas con mayor claridad.

El libro nos muestra que el mundo no es tan complicado como nosotros pensamos sí nos enfocamos en lo que queremos, que las relaciones interpersonales son sólo algo que tenemos que vivir a diario, algo que muchas veces no logramos entender y que tal vez no es necesario entender para poder seguir caminando por el mundo, y aunque nos resulte imposible ponernos en los zapatos de alguien que es diferente a nosotros en muchos sentidos, El curioso incidente del perro a media noche nos ayuda a entendernos un poco más a nosotros mismos.

Una raya roja en el camino



Muchas veces las cosas son infinitamente más sencillas de lo que parecen, vivimos encerrados en un mundo lleno de emociones que a veces distorsionan nuestra realidad y nos es muy difícil controlarlas si no somos lo suficientemente fuertes y nos enfocamos únicamente en aquella meta que nos hemos propuesto seguir, si no vemos sólo hacia aquello que nos interesa y que nos mueve.

Cuando decidimos pasar el resto de nuestra vida con alguien tenemos en mente una imagen de dos ancianos, muy parecidos a nosotros, tomados de la mano, con brillo en los ojos y una sonrisa en el rostro, aunque el día anterior a la boda hayamos tenido miedo a caer en el precipicio de nuestra existencia por una decisión probablemente equivocada.

No nos queremos dar cuenta de todas las complicaciones inesperadas, inexplicables y dolorosas que se nos podrían llegar a presentar por estar volando más alto de lo que deberíamos permitirnos, y al no tomarlas en cuenta nos encontramos frente a frente con un peligro que nos desvía del camino sin las armas suficientes para enfrentarlo, porque nunca pensamos en conseguirlas. Peligros como hijos con problemas, vecinos intrometidos, terceras personas, diferencias, caracteres distintos, puntos de vista opuestos, peleas y separaciones.

El libro El curioso incidente del perro a media noche de Mark Haddon nos presta un punto de vista que habla de que, a veces, es necesario ver la realidad de una forma fría, exacta y poco voluble. Sin mentiras, ambigüedades y presentimientos, sin que algo que no consigamos entender nos manipule de tal forma que nos haga perder el sentido de la realidad, que nos haga perder nuestro camino. Nos enseña una cara de la vida donde un mundo, como el que Christopher ve en sus sueños, resulta ser mucho más seguro y nos lleva a nuestro destino sin mirar a otro lado, sea este una profesión, un amor platónico, un proyecto de vida, etc. Nos lleva a preguntarnos el porqué de nuestras acciones y sentimientos ya que la mayor parte de éstos son como objetos dentro del mar, dentro de un lugar que nos abre un panorama enorme de posibilidades que no conseguimos manipular por el enredo de ideas que tenemos dentro de nuestros pensamientos.

Resulta mucho más fácil entender una frase que diga, "Cuando me haya licenciado en Matemáticas o Física conseguiré un trabajo y ganaré montones de dinero y podré pagar a alguien para que cuide de mí y me haga la comida y me lave la ropa, o encontraré a una señora que se case conmigo y sea mi esposa y ella podrá cuidar de mí..." (Haddon, 55), que algo como, "Quiero ser feliz"...

Ver el mundo desde los ojos de un niño con "necesidades especiales" como Christopher nos hace comprender un poco más todas estas situaciones que a veces no nos dejan sonreír incluso cuando pensábamos que lo íbamos a hacer en ese momento de nuestra vida, o cuando teníamos planeado algo totalmente distinto a lo que estamos viviendo.

Es difícil entendernos a nosotros mismos, pero es fácil entender al mundo que te rodea con la idea de que todo tiene un cómo y un porqué, un orden exacto de los fenómenos físicos, psicológicos y naturales.

No sabemos qué tanto es bueno ilusionarnos, pues tal vez lo que estemos sintiendo en un momento no sea lo más que podemos llegar a sentir por alguien o por algo, o tal vez quien está a tu lado no es la persona con la que más lejos podrás llegar, pero nunca lo sabemos con exactitud, por eso tenemos cambios, por eso nos confundimos y tomamos decisiones equívocas como irnos a vivir lejos de alguien que tal vez nos necesite, como le hizo Madre, o no saber controlar nuestras emociones y llegar a lastimar gente que queremos, como lo hizo Padre. Son muchas cosas que tomar en cuenta para llevar una vida relativamente feliz, o por lo menos en su mayoría, demasiados pensamientos con un mismo fin y demasiados caminos alternos que podemos recorrer.

En el libro es muy sencillo lograr distinguir ejemplos de lo que afecta nuestra vida y a todos los que la rodean, gente que queremos, que nos son importantes en algún otro sentido o cualquier persona incidental que se nos cruzó por el camino.

La vida da un montón de vueltas que jamás esperamos y a veces no para de girar durante mucho tiempo, nos sentimos mareados, extraños a nuestra propia naturaleza y sin saber hacia dónde dirigirnos, pero tal vez, si nos enfocáramos en un camino, si pintamos una línea roja en la vida hasta llegar a ser licenciados, médicos, esposas o maridos, los problemas que nos encontráramos en él no serían tan difíciles de resolver porque tendríamos en mente lo que en verdad nos inspira a dar cada paso hacia delante, nuestros sueños.